Lo decía mi abuelo: “el que come escapa”… Y quizás por esa filosofía que dictaba este boticario aragonés, sumada al savoir faire de nuestra antepasada francesa a la hora de dirigir la parafernalia diaria ante los fogones de su casa de Lagasca, ahora podemos presumir de proceder de una familia de octo-nonagenarias! Voici la recette para disfrutar de una larga vida, lo más ajena posible a los sobresaltos de la prima de riesgo, la deuda financiera y otros sinsabores crematísticos…
A nosostras más que jugar a la Bolsa… nos gusta comer. Lo más sano posible y en un ambiente agradable que puede ser o no de lujo. El restaurante abierto hace relativamente poco tiempo en el madrileño Paseo de la Castellana, que regentan José Manuel Rico-Zorrilla y su mujer, la mexicana Diana Burillo, es una buena opción. Hablamos de Vintage Madrid, un lugar donde conviven objetos rescatados de los mejores anticuarios de la capital española, especialistas fundamentalmente en los 40´s y 50´s, con fantásticas tapicerías y una cocina sencilla pero sabrosa y de brillante elaboración. ¿Qué tal un steak tartare con ternera cortada a cuchillo y sugerentes salsas? o unas sabrosas albóndigas de rabo de toro… Para chuparse los dedos.
Si igualmente sois amantes de una mesa más sencilla pero con el mismo encanto vintage, os dejamos unas imágenes de nuestro último viaje por Italia… Allí, en Porto Venere, una costa para quitar el hipo, aprendimos a hacer unos raviolis deliciosos.
Y de postre, qué tal un gelato?